Después de trece jornadas disputadas y con las sensaciones por los suelos después de tres derrotas seguidas, así está el Real Valladolid tras el parón de Copa: cuarto clasificado a cuatro victorias del líder, Breogán, y dos por encima del sexto, Melilla, que marca el límite para poder meterse en la lucha por el ascenso (recordemos que son los cinco primeros de cada grupo los que optan a la ñunica plaza de ACB que se disputa esta temporada).
Echando la vista atrás, el Real Valladolid comenzó de forma apabullante, con números defensivos de altísimo nivel, especialmente en Coruña, y siendo uno de los mejores ataques de la competición. Todo esto se apoyaba en la estadística avanzada, con muy buenos datos en porcentaje de tiro efectivo y rating defensivo. Pero, si bien sigue siendo un ataque que está entre los mejores de la liga, el apartado defensivo lo coloca por debajo de la media. Echemos un vistazo a aspectos concretos.
Hay apartados que pueden llevarnos a engaño, como el de los puntos por partido. Ahí, el conjunto de Hugo López es el mejor del Grupo A (78,4 puntos por encuentro). Pero, si recurrimos a la estadística avanzada, que mide la eficiencia ofensiva y el porcentaje real de tiros, los morados no están tan arriba como pudiera parecer. Son los cuartos en rating ofensivo y porcentaje de tiro verdadero (que ya lo explicamos aquí) y los terceros en puntos por posesión. Todo ello viene explicado por el elevadísimo número de posesiones que el Real Valladolid despliega en cada choque, el más alto de todos y con mucha diferencia sobre el segundo (Lugo). Esto significa que los pucelanos tienen un ritmo altísimo pero su acierto y eficiencia en ataque no está, por ahora, a ese nivel.
Por terminar con el lado ofensivo, algo que nos llamaba mucho la atención en pretemporada y en algún encuentro del inicio de liga, era el uso del triple. Esta tendencia se ha mantenido en el tiempo y los de Hugo López son los segundos que más lanzan, sólo por detrás de Burgos y muy cerca de Palencia. Esto no quiere decir que abusen de este lanzamiento, ya que otra vez el elevado número de posesiones hace que el uso del triple represente un 37% del total de lanzamientos, dato que está en la media de la liga. Pero (siempre hay un «pero»), el acierto exterior del Real Valladolid (36,4%) es el séptimo peor del grupo, superando por muy poco a Cáceres y Coruña.
Pasando a la defensa, los pucelanos se encuentran en la parte media-baja de la tabla con 78,4 puntos recibidos (casualmente, el mismo número de puntos anotados por encuentro) y un rating defensivo al mismo nivel. Teniendo en cuenta que el equipo ocupa la cuarta plaza del grupo no serían datos extremadamente negativos, está claro. Así está el Real Valladolid tras el parón de Copa y la lectura que ha de hacerse con todos estos números y estadísticas es que, como bien se aprecia en la clasificación, no es un equipo élite de la liga y, por ahora, está muy lejos de serlo.