Se ganó a Ourense defendiendo mal y gracias a un derroche ofensivo en los últimos minutos, la victoria frente a Coruña demostró que el nivel atrás marca la identidad de un equipo y, contra Palencia, el Real Valladolid Baloncesto demostró que son candidatos a todo venciendo en todos los escenarios posibles: atacando, defendiendo, en las trincheras y sabiendo qué hacer cuando venían mal dadas.
Salió Hugo López con una novedad en el quinteto inicial, dando entrada a Nacho Martín en lugar de Sergio de la Fuente. Y el #11 le dio la razón a su entrenador, anotando los primeros siete puntos de su equipo. Arturo Álvarez, por su parte, sacó músculo con Gatell en el puesto de “cuatro” para aportar en el rebote defensivo, descargando a Borovnjak del trabajo sucio para tener total libertad en ataque, algo que supo aprovechar con cuatro tantos en los primeros minutos.
Nacho, por su parte, seguía haciendo de las suyas y obligó a Palencia a mover el banquillo para cambiar asignaciones defensivas, quedando el ya mencionado Borovnjak para frenar al imparable ala-pívot vallisoletano (acabó el cuarto con 10 de valoración). Rebotes, asistencias, puntos y faltas recibidas, todo sumaba y todo ayudaba para que su equipo, poco a poco, fuera cogiendo las primeras rentas en el electrónico (13-8 min. 6). La defensa de manos, agresiva y efectiva, que ya apuntó Arturo Álvarez en la entrevista que concedió a Baloncesto Valladolid esta semana, apareció y cortocircuitó a los Richotti, Zubizarreta o Dani Rodríguez, sin importar quien estuviera liderando la ofensiva palentina.
Un gran inicio de Sergio de la Fuente, con cuatro puntos y una técnica provocada a Zubizarreta, disparó a los pucelanos once puntos arriba (28-17). Y la dinámica del primer período continuó en este segundo cuarto. Palencia no encontraba ritmo, incluso desaprovechaba contraataques en superioridad, y la defensa del Real Valladolid seguía dejando muy pocos espacios para que los puntales anotadores palentinos pudieran sumar. En el cuadro local, la fluidez anotadora fue bajando, pero no así la intensidad en ambos lados de la cancha, condición indispensable para ser candidatos a todo, con un Kavas inmenso atrás (aunque con una terrible falta de confianza en ataque) y el capitán De La Fuente apareciendo por todas partes.
Arturo Álvarez, ante la dificultad de su equipo para meter puntos (Smits y Van Zegeren controlaron a la perfección a Borovnjak), recurrió al quinteto de inicio con Dani Rodríguez en el puesto de base y solo Massarelli suponía un peligro para la defensa morada. De hecho, fue el argentino quien, con una canasta sobre la bocina (37-28) dejó la renta pucelana por debajo de la decena. Porque en Palencia también son candidatos a todo.
Tras el paso por vestuarios, Palencia Baloncesto salió enchufado al partido y un par de controvertidas decisiones arbitrales sacaron al Real Valladolid del encuentro. En apenas tres minutos la ventaja se había consumido, lo que obligó a Hugo López a pedir tiempo muerto. El ritmo del choque decayó de forma alarmante y sólo algún momento puntual, como el triple de Timmer a tres minutos del final del cuarto o las protestas por las polémicas faltas pitadas (y no pitadas), despertó del letargo a la parroquia pucelana. A pesar de eso, el mejor Mason de la temporada apareció para evitar que los visitantes se pusieran por delante, llegando al último y definitivo parcial con tres puntos de ventaja (48-45) y todo por jugarse.
Y Sergio sintió el picorcito. El vallisoletano empezó a sonreir, destapó el tarro de las esencias y lideró un parcial de 5-0 para dar confianza a los suyos después de unos minutos muy espesos. Pero una antideportiva de Smits sobre Borovnjak y una canasta posterior del serbio bajó de golpe el momentum del cuadro local. El partido se embarró por momentos y ahí es donde, de nuevo, el carácter de jugadores candidatos a todo, como Pantzar, Paasoja y Sergio de la Fuente espoleó al Real Valladolid. Un 2+1 del base sueco, otro triple del estonio y el juego de trincheras del capitán mantenían a raya las acometidas palentinas (61-52) a falta de cinco minutos para la conclusión.
Los últimos instantes del partido tuvieron una carga emocional enorme. Hugo López puso toda la carne en el asador, con Nacho y Sergio en pista y la defensa exterior de Paasoja y Mason para contener a Richotti y Massarelli, éste último desaparecido en combate. Porque el juego dejó de ser vistoso y el partido pasó a ser de esos que hay que saber ganarlos. Palencia se encomendó a Borovnjak, aunque se iba quedando paulatinamente sin ideas, y sólo el exceso de confianza local los mantenía vivos.
Finalmente, aunque a un minuto del final los vallisoletanos seguían arriba (68-63) y jugadores como Richotti o Purifoy metían el miedo en el cuerpo a la grada de Pisuerga, el conjunto de Hugo López jugó con el tiempo y el marcador para alzarse con un triunfo que le mantiene en un inmaculado balance de tres triunfos y cero derrotas, convirtiéndolos en candidatos a todo en esta LEB Oro.
FICHA TÉCNICA
73 – Clínica Sur-Aspasia Real Valladolid Baloncesto: Timmer (17), Paasoja (6), Kavas (0), Martín (7), Van Zegeren (10) – quinteto inicial – Gantt (0), Mason (8), De La Fuente (17), Astilleros (0), Pantzar (6), Smits (2)
66 – Destino Palencia: Zubizarreta (4), Richotti (14), Massarelli (7), Gatell (1), Borovnjak (24) . quinteto inicial – Purifoy (9), Rodríguez (5), Smith (2), Narcis (-)
Parciales: 23-15, 14-13, 11-17, 25-21
Árbitros: Bravo, Uruñuela, Checa. Eliminado por faltas Borovnjak (Destino Palencia).
Incidencias: Partido correspondiente a la tercera jornada de la Liga LEB Oro disputado en el Polideportivo Pisuerga ante 1.200 espectadores