No ha sido por las razones que más le hubieran gustado, pero el éxito ACB de Iñaki Martín en estas dos semanas es un hecho y pone en valor a un entrenador de altísimo nivel y que tiene un presente y un futuro excepcional.
Era domingo y toda la familia baloncestística vallisoletana estaba pendiente de la televisión para vivir el debut de Iñaki Martín como primer entrenador de Gipuzkoa Basket en su duelo en casa ante Tenerife. Numerosos mensajes de apoyo a través de redes sociales tenían como destinatario al técnico del conjunto vasco: «Fue increíble. Ver ese apoyo de todos fue espectacular, se me agotó la batería del móvil por todo lo que me llegaba. Aquí en San Sebastián me siento muy arropado y muy querido y también me transmitieron mucho cariño. Pero lo de Valladolid fue demasiado», recuerda Iñaki, con quien hablamos sin conocer aún si este próximo domingo se sentará en el banquillo como entrenador principal ante el todopoderoso Barcelona. «No sabemos aún, Marcelo está mejor pero queremos esperar», explica.
Preguntado por qué tal se ha sentido estas dos últimas semanas, el vallisoletano de adopción ha recalcado que el paso de segundo a primero ha sido «muy normal, fluido. Los jugadores han estado genial y lo han tomado como si fuera un nuevo entrenador, no han tenido en cuenta que era el ayudante». Más allá del trabajo semanal, coordinado totalmente entre Iñaki y Marcelo Nicola, la gran diferencia de status llega el fin de semana. Ahí nuestro protagonista vuela solo: «Evidentemente somos entrenadores distintos y yo he tenido la suerte de que mi mensaje ha llegado y ha calado en los jugadores durante los partidos», admite el técnico.
Aquí está su primer tiempo muerto en la máxima categoría del basket nacional:
Hay que decir que, pese al debut en la categoría, Iñaki Martín tiene un bagaje amplísimo como líder del banquillo y esta situación no ha sobrepasado. «Estaba tranquilo porque, para bien o para mal, tengo experiencia y no deja de ser un partido de baloncesto. De hecho, estaba más nervioso en el segundo contra Joventut», reconoce Iñaki entre risas. El ejemplo más claro de esa relajación ante situaciones tan excepcionales como estas se dio en la última jugada del choque frente a Tenerife. Con Gipuzkoa por debajo y apenas segundos por jugarse, la pizarra de Iñaki dio resultado y Mike Carlson anotó el triple de la victoria. El técnico, en medio de la explosión de júbilo de los suyos, permaneció impasible: «Sólo pensaba en mostrar respeto y saludar a Txus (Vidorreta) y al resto del equipo contrario», explica nuestro protagonista.
Otra muestra más del éxito ACB de Iñaki Martín es que, bajo su mando y, teniendo en cuenta las circunstancias excepcionales, Gipuzkoa Basket ha ganado dos encuentros ante rivales de muchísimo nivel: «Casi todos nuestros rivales son superiores a nosotros. Tenemos el presupuesto más bajo de la liga y tenemos que competir y ganar partidos en condiciones diferentes al resto», finaliza el «vallisoletano».