Un triunfo y una derrota como balance del fin de semana en la tercera jornada de la Primera Masculina pero, más allá de eso, los partidos disputados este domingo nos dejan grandes esperanzas para La Flecha y Aldeamayor en su camino por la liga.
La victoria nos llevó a Soria, donde el CB La Flecha volvió a ofrecer una imagen inmejorable, compitiendo a las mil maravillas y siendo capaz de controlar un encuentro de principio a fin. Porque arrancó como un rayo el cuadro arroyano gracias a un parcial de 2-12 en los primeros instantes del duelo, con Carlos Ruiz y Alberto Martínez como estiletes. Los sorianos tuvieron que parar el partido y, después del tiempo muerto, consiguieron engancharse de nuevo gracias a dos triples en la parte final del período que empataron el marcador. Esa igualdad se mantuvo a lo largo del segundo cuarto, con pequeñas alternancias de uno y otro equipo pero sin despegarse ninguno de los dos. Especialmente acertado en el lado de La Flecha estuvo Yosu Franco, que capitalizaba gran parte de las acciones ofensivas de los suyos, además de todo el entramado defensivo dispuesto por Juan Vicente Vélez con el objetivo de parar a Carlos Romano, base y director de juego vallisoletano que lidera a Soria en esta Primera Masculina.
Tras el descanso se produjo el despegue visitante. La buena circulación de balón y la agresividad hacia canasta permitieron a La Flecha anotar con fluidez, limitando las acciones rivales y saliendo con velocidad al ataque. Dos triples del local De Domingo lograban ajustar un marcador que ya enseñaba a los arroyanos las posibilidades de victoria. Al llegar al período final, Soria se propuso que los rojillos no anotaran fácilmente y planteó todo tipo de situaciones para impedirlo, además de que aumentó considerablemente el nivel de agresividad en defensa. Debido a esto, los de Vélez sólo anotaron tres canastas en juego y tuvieron que lanzar hasta dieciocho tiros libres, de los que anotaron una decena, acierto que les valió para no pasar apuros e incluso aumentar la diferencia a los diez puntos finales (65-75).
En la derrota de la jornada tenemos que irnos a Aldeamayor, donde el cuadro local sufrió en exceso el mal día en ataque de casi todos sus hombres. Ya el primer cuarto fue nefasto para los pucelanos, quienes encajaron un parcial de 13-21, con ocho de esos trece puntos desde el tiro libre, y que explica a las claras el colpaso ofensivo de los de Felipe Cifuentes. Pero, por si no fuera suficiente, el segundo período siguió por los mismos derroteros. Los triples no entraban y sólo César Peláez parecía ver el aro con facilidad. Por parte soriana, Mínguez y Lázaro sumaban sin parar, aumentando la diferencia en el electrónico de forma constante hasta llegar al 25-42 con el que se llegó al descanso.
El receso parece que sentó bien al equipo pucelano y, con un 14-4 en este tercer período, finiquitado con un triple muy poco ortodoxo de Cristian Domingo, se volvieron a enganchar al partido. La defensa, que apenas había aparecido en la primera mitad, fue protagonista tras el paso por vestuarios, pero no pudieron darle continuidad debido a los ajustes arbitrales posteriores. Y es que, si en el tercer cuarto los aldeamayorenses sólo cometieron dos faltas, en el último les fueron señaladas un total de diez, lo que llevó a Claret a la línea de personal y les permitió anotar mucho desde allí. Por cierto, en este festival del silbato, se lanzaron cincuenta tiros libres entre los dos equipos. A la desesperada, Aldeamayor recurrió al triple pero las tres conversiones en este período no fueron suficientes para lograr la remontada y se quedaron, de nuevo, con la miel en los labios. Esta joranda, pese a tener sólo una victoria, nos ha dejado grandes esperanzas para La Flecha y Aldeamayor que ojalá se confirmen con doble triunfo en la última jornada del año.