En las últimas semanas hemos visto actuaciones individuales de nuestro protagonista absolutamente dominadoras. La última, la que desplegó ante el líder invicto y que hizo que el CB La Flecha se llevara la victoria. Fue la explosión de Silvano Merlo, la consumación de un jugador diferencial en Liga EBA como referente de una competición que aspira a dejar atrás el año que viene, cuando juegue en el Ciudad de Ponferrada de LEB Plata (como mínimo), club propietario del argentino.
Porque su llegada a España se produjo en un contexto contractual desconocido para Silvano, quien reconoce que la fórmula de la cesión no es habitual en Argentina: «Al principio me sorprendió pero luego tuve una videoconferencia con gente de Ponferrada y me explicaron cómo iba a ser todo el proyecto. Me hablaron de La Flecha, de Roberto y de los entrenadores, de cómo manejaban el proyecto. Y eso es lo que me convenció para venir», explica Merlo en sus primeras declaraciones a un medio de comunicación en España. Además, «Chivi», como le gusta que le llamen, no dudó en afirmar la razón por la cual ha llegado a la entidad arroyana: «Desde el primer momento me comentaron todo lo relacionado con el cuerpo técnico y que ese era el factor principal por el cual me mandaban acá».

Pero, antes de hablar de su llegada a España, repasemos quién es Silvano Merlo. Nacido en la localidad de Junín, en el distrito de Buenos Aires, nuestro protagonista tuvo presente el baloncesto casi desde su nacimiento: «Vengo de una familia muy basquetbolista. Empecé a los 3 años, me mandaron mis padres y me encantó desde el primer momento. Lo compaginé con el fútbol pero, a los 13, tuve decidirme porque ya estaba en torneos con la selección. Me costó, me encantaba el fútbol pero, por ahora, ha salido bien», comenta. Tan bien le fue que, desde la categoría U14, ha sido un habitual en las concentraciones de la selección albiceleste: «Este año iba a ir al primer torneo con la U18 pero la pandemia lo suspendió y me quedé con las ganas».
De regreso a su fichaje por el Ciudad de Ponferrada y su préstamo a La Flecha, Silvano tuvo que sopesar todo lo que conllevaba dejar su Junín natal y el club de toda la vida, Ciclista. Pero la situación derivada del COVID hizo que tuviera que plantearse su futuro: «Ya se sabía que en Argentina la cosa iba para largo y decidí, junto a mi representante, venir a España», reconoce. Así, abandonó la Perla del Noroeste con destino a Arroyo y parada intermedia en El Bierzo. Pero, como es normal en un chaval de 18 años, hubo momentos complicados: «Fue difícil salir de mi zona de confort, alejarme de la familia, aunque todos me ayudaron mucho y estoy muy feliz». El aterrizaje en España le cargó de ilusión porque llegaba a un baloncesto que conoce muy bien y que tiene mucha relación con su país, no obstante grandísimos jugadores argentinos han desarrollado sus exitosas carreras en la ACB o en competiciones FEB. De hecho, Merlo explica que «muchos triunfaron en España y eso es por algo, el rendimiento ha sido excelente. Yo me identifico mucho con la pasión y con el carácter del basket argentino».
Uno de los artífices de que Silvano esté en España es David Barrio, técnico del conjunto berciano y con quien tiene un año más de contrato. El entrenador vallisoletano define a «su pupilo» como un jugador con un «talento competitivo brutal y mucho potencial. Está demostrando calidad y talento cuando tiene espacio e importancia. El camino y la proyección son correctos y creemos que tiene todo para llegar mucho más arriba». Barrio ha explicado a Baloncesto Valladolid la situación de Merlo con el Ciudad de Ponferrada: «Es un jugador vinculado y podría jugar también con nosotros perfectamente pero respetamos muchísimo el trabajo de La Flecha y consideramos que es mejor que esté allí a tiempo completo. Estar con ese cuerpo técnico es la razón principal de que lo cediéramos allí, esa es la realidad. Eso sí, en principio, el año que viene estará con nosotros», confirma el técnico.
La importancia de caer en el equipo indicado
Hay una figura capital que explica la explosión de Silvano Merlo: Roberto González y su cuerpo técnico. «Estoy encantado con todos, saben muchísimo de baloncesto y me impresiona la forma con la que se comunican. Con Roberto en el día a día todo es mucho más fácil y te da consejos que, si no los coges, es que eres un cabeza dura», admite entre risas. El técnico de Carpio ha referido que su jugador «tiene algo muy importante que ellos llaman gol. Es listo y tiene mucha intuición pero está adaptándose a ser un director de juego, tiene que entender que debe hacer jugar. Además, está evolucionando mucho en defensa porque no solo vale con meter goles, también hay que pararlos». Es en esta aspecto en el que el propio Silvano reconoce una mejora muy evidente, ya que «me he tenido que adaptar al equipo. Pero me gusta, es una mezcla de compromiso, ganas e ir aprendiendo cada día y cada detalle».
De Merlo hemos visto sus actuaciones ofensivas de 30 puntos o más, por ejemplo. Pero también queríamos saber cómo se define él, qué características destaca de su juego: «La caradurez, las ganas. No se si soy así pero al menos trato de dárselo al equipo», comenta el de Junín, quien evita hablar de estadísticas individuales, como los 40 créditos de valoración en el último choque, frente al líder de la competición: «Todos jugamos de manera extraordinaria y lo más importante es que ayudé al equipo a conseguir la victoria, nada más».

Fuera de la cancha, Silvano se encuentra arropado e integrado en el equipo y en la ciudad: «Se lo digo a todos los que me preguntan, estoy súper contento aquí, con los jugadores y los entrenadores, incluso con las familias de los compañeros», declara el jugador, quien no duda en señalar lo que menos le gusta de Valladolid: «El frío, la diferencia con mi ciudad es enorme pero bueno, todo es cuestión de acostumbrarse». Ese buen ambiente en el vestuario se ve reflejado en muchos aspectos, como las rutinas con los calcetines antes de salir a pista («soy muy cabulero* y me gustan esas supersticiones») o las risas de los compañeros ante las palabras de procedencia argentina que utiliza: «Me hacen reir mucho porque todos bromean con mi acento y mis palabros. Me imitan y me hacen morir porque lo hacen con buena intención», explica Silvano divertido.
Y es que su talento, la «buena química que tenemos» y su capacidad de trabajo han hecho de la explosión de Silvano Merlo uno de los acontecimiento baloncestísticos más destacados en Valladolid. Apenas le quedan a La Flecha nueve partidos, con lo que hay que aprovechar lo que le quede por aquí antes de que vuele más alto. Desde Junín al cielo, pasando por La Flecha.
*supersticioso