La Primera Masculina sufre ahora mismo los rigores de una competición con pocos equipos y que tuvo un calendario «extendido» por si era necesario disputar encuentros aplazados por razones sanitarias (como así ha sido). Esto ha tenido (y tiene) como consecuencia, muchas semanas sin partidos y ahora se avecina un mes de parón para Aldeamayor y La Flecha. Eso sí, los arroyanos podrán matar el gusanillo con la disputa de su encuentro frente a Claret a mediados de febrero.
Más allá de disquisiciones sobre la idoneidad de la planificación de la liga o los problemas que ha tenido debido al COVID, además de que tiene un lastre importante por el escaso número de equipos participantes, la Primera Masculina ha ido solventando los problemas que han ido surgiendo. Gracias a la labor de los propios clubes y de la Federación, que tuvo que atajar la «insurrección» de Claret al no querer hacer tests a sus jugadores, se ha podido disputar prácticamente la totalidad del calendario. Y, en estas próximas semanas, se pondrán todos los equipos al día antes del inicio de la segunda fase, prevista para marzo.
En lo que se refiere a nuestros equipos, ambos tienen definidos sus caminos. La Flecha, haga lo que haga ante Claret, está clasificado para disputar la fase que daría acceso a la Liga EBA, mientras que la otra plaza se la jugarán los segovianos y Soria, a los que hay que sumar a otros tres del Grupo B (Agustinos ya está clasificado y las otras dos plazas se las repartirán CB Palencia, Venta de Baños y Villares). Por su parte, Aldeamayor pasará a jugar, en esta segunda fase, por al título de Copa FBCyL junto a Virgen de la Concha. Las otras dos plazas no se conocerán hasta que se resuelvan los duelos aplazados que deberán disputarse en próximas fechas.
Con objetivos muy similares, las dos escuadras vallisoletanas han alcanzado metas distintas por diversos motivos. En primer lugar, La Flecha ha sido mucho más regular, con una línea de juego estabilizada debido a casi toda su plantilla lleva jugando junta desde hace años, lo que les ha hecho poder cerrar partidos con victoria más frecuentemente. En cambio, la inexperiencia y el bloque aún por formar de Aldeamayor ha tenido como consecuencia más derrotas de las que, tanto por juego como por sensaciones, ha merecido. Ahora, con un mes de parón para Aldeamayor y La Flecha, podremos analizar más detenidamente el papel de unos y otros y qué les espera en la segunda fase que está por venir.